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miércoles, 2 de mayo de 2012

El Líder en los Nuevos Tiempos

Hoy os voy a hablar de Liderazgo y para ello qué mejor que hablar de Richard Boyatzis, uno de los principales expertos en desarrollo de liderazgo e inteligencia emocional.

En la actualidad, Boyatzis es profesor en el Departamento de Comportamiento Organizacional, Psicología y Ciencia Cognitiva de la Case Western y en Recursos Humanos de ESADE en Barcelona. Ha escrito más de 100 artículos sobre el liderazgo, la motivación, el cambio de comportamiento, la inteligencia emocional y las competencias de gestión. Su investigación sobre el comportamiento humano ha revolucionado la gestión de la educación y ha contribuido a generar una nueva generación de consultores y coach ejecutivos.


Su primer libro ““Liderazgo Resonante”, fue un gran éxito de ventas y se publicó en 18 idiomas. Después, vinieron las "secuelas" “Convertirse en un líder resonante”, escrito junto a Annie McKee y Fran Johnston y el más reciente "El Líder resonante crea más", en coautoría con Daniel Goleman y Annie McKee.


Me gusta su teoría o “concepto de líder”: el Líder Resonante.

Para Boyatzis, el líder tiene que ser un Líder Resonante, es decir aquel que genera emociones positivas en sus subordinados a través del cultivo de tres factores: conciencia, esperanza y compasión.



Líder resonante frente a Líder disonante: ningún líder está libre de volverse disonante, es decir, de generar emociones adversas en el personal. Los líderes disonantes son víctimas del llamado “Síndrome de Sacrificio”, consistente en entregar más de lo que se puede, entrando en una espiral de estrés de la que es muy difícil salir. Pero hay una solución, un proceso de renovación personal que el libro ofrece a los líderes disonantes para ser Líderes Resonantes en sus organizaciones.
Para conocer más sobre este proceso hay que leer el libro, recomendado a todos, pero sobre todo, a aquéllos que tienen que liderar equipos, porque en los Nuevos Tiempos o se es Líder Resonante o no se lidera, se gestiona.

5 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo con todo, menos con lo de compasion. conciencia, esperanza SI, pero compasión NO. Los trabajadores no tienen que sentir compasion sino orgullo.

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  2. Como dicen en el ala oeste de la casa blanca “un líder sin seguidores es un tío paseando por el desierto”
    La gran diferencia entre gestores y líderes es que el gestor consigue que sus colaboradores hagan lo que él quiere que hagan, mientras que el líder consigue que sus colaboradores quieran hacer lo que él quiere que hagan. Y al final hay un factor que condiciona la capacidad de desarrollo del liderazgo de cada persona: el miedo a conocernos. No existe desarrollo del liderazgo sin el desarrollo personal, y este pasa por hacerse un DAFO interior, a lo que no todo el mundo está dispuesto.
    Muy interesante el libro de Boyatzis y recomiendo también echarle un ojo al blog de Pilar Jericó http://www.pilarjerico.com/. Un saludo Elsa.

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  3. Gracias Javier, me apunto el blog!

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  4. Gracias Ramón, entiendo lo que dices porque la compasión tiene a veces una connotación negativa, al menos en nuestro idioma. Ten en cuenta que el autor escribe en inglés, donde creo que "compassion" está más cerca de "empathy" que de "pity".

    Hace tiempo que lo leí, me lo prestó un amigo con lo que no lo tengo en mi biblioteca pero recuerdo que en el libro se habla de compasión más en ese sentido de Empatía, de entender las necesidades de quienes nos rodean, respetando su visión, de ponernos en el lugar del otro...Y eso es algo fundamental cuando se vive/trabaja en grupo y más aún cuando se trata de liderar las personas de dicho grupo.

    Apuesto Ramonín que con este sentido sí estás de acuerdo:-)).

    Es un buen libro, te lo recomiendo.

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  5. El desarrollo de la inteligencia emocional es vital para todos y todas (jefes, mandos intermedios, trabajadores...) sobre todo cuando hay una labor de equipo. Interesante el comentario de Javier y la diferencia entre gestores y líderes. De todas formas muchas veces no se debe tanto a las capacidades y habiliades de las personas que dirigen a los equipos como que falta un Proyecto: para ilusionar y comprometer a la gente es necesario poder implicarse en un proyecto que sea ilusionante, algo que por desgracia no abunda demasiado.

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