Está claro que habitualmente, cuando
hablamos de lentitud nos referimos a la “lentitud
mala” como la que sufres en un atasco en la M30 a la vuelta del trabajo. “Lento”
es una palabra mala en nuestra cultura, sinónimo de holgazán, de vago, de ser
alguien que se rinde. Decir “Él es un poco lento” es, en realidad, sinónimo de
ser estúpido.
La
rapidez se ha convertido en una competencia básica que no sólo cualquier
profesional debe potenciar, sino que toda persona debe reunir para ser eficaz y
sobre todo eficiente.
Pero
también hay una “lentitud buena” que
te hace avanzar más despacio, sí, pero disfrutando del camino. Así que vamos a
derribar el tabú que existe sobre la lentitud y demostrar que también existe esa
“lentitud buena” y que debemos aprender a valorarla.
Es
por ello que sorprende escuchar al periodista Carl Honoré en este genial discurso que dio en TED bajo el título: “El Elogio de la Lentitud”.
En
ella nos habla del Movimiento
Internacional Lento y nos da algunos ejemplos de cómo ser lento también
puede ayudarnos a ser más productivos y alcanzar nuestras metas. De cómo todos
debemos desacelerar antes de recibir una “llamada de atención” que, tarde o
temprano, nos llega a todos.
Aquí
podéis ver el vídeo completo: "In praise of Slowness"
Os dejo también dos regalos, a disfrutar muy
lentamente;))
1. Esta preciosa canción de Julieta Venegas, que no
podía llamarse de otra manera: “Lento”
2. Y las hermosas palabras de la periodista Mercé Roura @merceroura en el siguiente post de su magnífico blog: “Sin gravedad, soltarse al fin”
Y
recordad… como dice Carl Honoré:
“Ha llegado el momento de vivir la vida en vez de correr por ella”
Me ha gustado mucho el post y la frase final de no hay que vivir la vida en vez de correr por ella. Una fase que siempre me ha gustado mucho es la de que no hay que llenar la vida de años sino los años de vida y esta claro que una de las formas es precisamente hacer que esa vida sea más "lenta", plena, consciente...
ResponderEliminarGracias Jose, me encanta tu frase. Muy acertada.
EliminarSaludos
Hola Elsa.
ResponderEliminarHace un par de años o así me regaló ese libro un "amigo invisible". He de decirte que me impactó realmente y me hizo darle muchas vueltas a la cuestión que plantea. También estuve investigando un poco sobre el movimiento SLOW. Desde entonces, he tratado de ir aplicando en mi vida algunas de las ideas que promueven y sinceramente cuando rompes ese hábito de correr por correr, ¡qué alivio! En cosas tan sencillas como conducir, por ejemplo.
Te recomiendo su lectura, sin duda. Yo, mientras, veré la charla en TED de Carl Honoré.
Y por cierto, escribí un post al respecto:
http://www.nachocambralla.com/2011/02/visteme-despacio-que-tengo-prisa.html
Un abrazo
Hola Nacho, yo el libro no lo he leído (aún) pero me encanta esta filosofía y modo de ver la vida, que intento a aplicar cada vez más, aunque siga siendo un poco acelerada por naturaleza o más bien impaciente.
EliminarY acabo de leer tu post! no lo había leído! Estamos conectados;)
Un abrazo
Pues yo creo que voy a tener que leer el libro y empezar a aplicarlo porque últimamente tengo la impresión de que por intentar hacer muchas cosas rápidamente no estoy disfrutando de ninguna y abandonando otras tan interesantes como leer tranquilamente tu blog ;)Saludos
ResponderEliminarYo también tengo pendiente leerlo. Tiene que estar muy bien a tenor del vídeo.
EliminarGracias y saludos